La Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas, FEERI, fue la primera federación inscrita en el Registro del Ministerio de Justicia el 17 de septiembre de 1989, mientras que la inscripción de la Unión de Comunidades Islámicas de España, UCIDE fue posterior, en el 10 de abril de 1991.
Las reformas de los estatutos de la CIE presentadas en 2007 y 2012 no fueron aceptadas por FEERI, como tampoco lo fueron los numerosos borradores entre estos años. Se aceptaron los presentados en 2015 y 2016 (éstos últimos denunciados en los tribunales por la FEERI por incumplimiento de los estatutos previos inscritos del año 2015). Oficialmente los órganos rectores de la CIE quedan constituidos como dictaminan los estatutos de 2016 vigentes:
- Junta Directiva de 15 miembros, de los cuales 11 pertenecen a UCIDE más otro que aporta de la Federación Islámica en las Islas Baleares (FICAIB), haciéndose con 12 de los 15 cargos que configuran la Junta Directiva. Los otros 3 corresponden a FCMAE (Federación de Comunidades Musulmanas Africanas en España, comunidad subsahariana), FEME (Federación Musulmana de España) y FAICE (Federación de Agrupaciones Islámicas por la Convivencia en España)
- Comisión Permanente, compuesta por 25 miembros proporcionales al número de comunidades religiosas representadas. UCIDE tiene 15 más la de Baleares (FICAIB) que también es de UCIDE. En total UCIDE acapara 16 sillones, 4 se reservan para FEERI (no tomó posesión de los cargos), y los 5 restantes se los reparten por igual la FIRM, CISCOVA, FEME, FCMAE y FAICE.
Constan también 8 Comisiones técnicas y 19 Delegaciones autonómicas.
En el Registro de Entidades Religiosas (RER) del Ministerio de la Presidencia, al finalizar 2023, constaban inscritas 53 federaciones confesionales islámicas (incluida la CIE), 1.964 comunidades religiosas y 21 asociaciones confesionales. FEERI, la segunda federación con mayor número de comunidades adheridas, consta con189 Comunidades islámicas y FIRM con 34.
La Comisión Islámica de España es la entidad encargada del seguimiento del Acuerdo de Cooperación con el Estado de 1992, intervenida por el Gobierno vía Decreto de 2011, por el Ministerio vía Resolución registral de 2012 y por Comisaría general vía detenciones, registros y embargos de 2019, 2021 y 2023. FEERI lleva desde 2016 sin ocupar sus cargos en la CIE.
La ausencia de FEERI en los asuntos de CIE durante todos estos años carece de justificación, pues alegar no conformidad con los estatutos aprobados no resulta argumento sólido y suficiente. Se podría haber incorporado a su puesto bajo imperativo ciudadano y así no ausentarse de reuniones en las que podría haber manifestado su opinión, lo que no es nada desdeñable si tenemos en cuenta que en los cónclaves de la CIE lo que falta son voces y líneas críticas. La ausencia ha demostrado que no sirvió para nada, incluso para acompañar denuncias que no prosperaron. Son años perdidos que no han beneficiado a nadie; menos aún, a la propia FEERI.
El tiempo ha venido a homologar que aquella fatídica decisión se debió a estímulos emocionales y no a una reflexión fría y serena de la situación. Estar no implica aprobar conductas contrarias a los propios pensamientos. Una muestra sencilla a tener en cuenta es la que se da en el Congreso de los Diputados y en cualquier cámara parlamentaria. Ningún partido abandona por la simple razón de que el contrario presenta y aprueba propuestas con las que no se está de acuerdo.
Benjelloun dijo algo interesante en una de sus visitas a Algeciras: “…hemos madurado”, anunció. Es momento de hacer uso de tal virtud.